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((**Es6.693**) vio resplandecientes de luz; a otros, con el alma y el corazón lleno de tierra; a otros, asediados, acompañados o atacados por animales diversos, símbolo de las tentaciones, de las ocasiones peligrosas y de los pecados. Este relato, expuesto por don Bosco con sencillez, gravedad y afecto paterno, dando al mismo tiempo mucha importancia a lo que decía, causó en todos la mayor y más saludable impresión. Todos los presentes, uno después de otro, quisieron saber de labios del siervo de Dios lo que sobre cada uno había visto, pudiendo comprobar con gran admiración que cuanto el buen padre les decía se adaptaba perfectamente a la más estricta realidad. >>En el Oratorio fue tan grande el saludable efecto de este relato, según se pudo apreciar por la conducta de los jóvenes, que mayor no se habría podido esperar de la más fructífera de las misiones. Todas estas cosas extraordinarias, que apenas si he mencionado, no se pueden achacar a una atenta observación de la vida ordinaria o a los conocimientos que el mismo don Bosco hubiese podido recabar de las confidencias que le hacían los jóvenes o de las relaciones con sus colaboradores. El siervo de Dios hablaba y obraba estas maravillas de tal modo, que a nosotros, que ya no éramos niños, no se nos ocurría otra explicación plausible o razonable, sino que se trataba de dones extraordinarios que el cielo le concedía. Y refiriéndonos simplemente al sueño o visión que acabamos de indicar, cómo habría podido ver y recordar con tal exactitud el estado de cada uno de los cuatrocientos ((**It6.919**)) jóvenes, entre los cuales se hallaban los que acababan de ingresar en el Oratorio y otros muchos que no se confesaban con él, los cuales, al oír de labios del siervo de Dios, la descripción viva e íntima de sus almas, de sus inclinaciones y pasiones, de sus actos más ocultos, reconocían que les había dicho la verdad?>>. Escribe monseñor Cagliero: <>La atención que prestaban los jóvenes a sus palabras causaba sorpresa e imponía en gran manera. >>Entretanto don Bosco, haciendo gala de una prodigiosa memoria y de una extraordinaria lucidez mental, al ser interrogado sobre (**Es6.693**))
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