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((**Es4.67**) la Sociedad, no olvidéis las reglas de la Compañía de San Luis, que os proporcionan la ventaja principal, que es la del alma. >>Que el Señor infunda en vuestros corazones la verdadera caridad y la verdadera alegría y el temor de Dios acompañen todos vuestros actos>>. Y seguía el reglamento. 1§ El fin de esta sociedad es prestar ayuda a ((**It4.75**)) los compañeros que caigan enfermos o se encuentren necesitados, por hallarse involuntariamente sin trabajo. 2§ Nadie podrá ser admitido en la Sociedad si no está inscrito en la Compañía de San Luis, y el que, por cualquier motivo, dejara de ser socio de esa Compañía, tampoco será considerado miembro de la Sociedad. 3§ Cada socio pagará cinco céntimos todos los domingos y no podrá gozar de los beneficios de la Sociedad, hasta después de seis meses de haber sido aceptado en ella. Pero, podrá tener inmediatamente derecho a la ayuda de la Sociedad, si, al entrar, paga 1,50 liras, con tal que entonces no esté enfermo ni sin trabajo. 4§ La ayuda para cada enfermo será de cincuenta céntimos diarios hasta su completo restablecimiento. Si el enfermo estuviere internado en alguna obra benéfica, cesará la ayuda, que no le sería prestada hasta salir de ella en el tiempo de su convalecencia. 5§ Los que sin culpa suya quedaran sin trabajo, empezarán a recibir dicha ayuda ocho días después de estar desocupados. Si el subsidio debiera sobrepasar los veinte días, tomará el Consejo las oportunas determinaciones para aumentarlo o reducirlo. 6§ Se aceptarán con reconocimiento todas las ofertas que se hagan en favor de la Sociedad, y cada año se hará una colecta especial. 7§ El que se descuidara en pagar su cuota por tiempo notable, no podrá gozar de las ventajas de la Sociedad, hasta que haya satisfecho la cuota atrasada, y durante un mes no podrá pretender nada. 8§ La Sociedad es administrada por un director, un vicedirector, un secretario, un vicesecretario, cuatro consejeros, un visitador y sustituto, y un tesorero. ((**It4.76**)) 9§ Todos los administradores de la Sociedad, a más de cotizar con exactitud los cinco céntimos de cada domingo, se preocuparán de observar las reglas de la Compañía de San Luis, para atender así a su propia santificación y animar a los demás a la virtud. 10§ El director nato de la Sociedad es el Superior del Oratorio. Este cuidará que los administradores cumplan su deber, y que se(**Es4.67**))
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