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((**Es3.353**) Venecia conservaba enhiesta la bandera de la independencia en medio de su laguna, bloqueada por los enemigos atrincherados en tierra firme. En Italia ((**It3.453**)) resonaban continuamente los gritos de íFuera el extranjero! íViva Pío Nono! Pero las sectas dominantes trabajaban sin descanso para proclamar la república italiana. Austria, a su vez, cubierta de ruinas y cadáveres, parecía estar reducida muy pronto a la impotencia. Hungría había declarado una guerra atroz contra Croacia, a la que quería someter. Viena se había rebelado y fue socorrida inúltilmente por el ejército húngaro, ya que después de sufrir sangrientos asaltos y bombardeos, del seis al treinta y uno de octubre, tuvo que abrir sus puertas a las fuerzas imperiales. El dos de diciembre renunciaba al trono el emperador Fernando y le sucedía su sobrino Francisco José. En Hungría se proclamaba la república y emprendía una guerra espantosa contra los ejércitos austríacos, que duraría hasta septiembre del año siguiente. >>Cómo era posible que las cabezas enardecidas de Turín cambiaran de opinión, o al menos la conservaran para sí mismas dentro de la continua lectura de periódicos que de mil modos defendían fogosamente las aspiraciones que se creían legítimas y santas? Y don Bosco, a quien no gustaban las satisfacciones que distraían los ánimos de una misión verdaderamente apostólica, no quería volver a repetir una experiencia que ya le había producido amargas consecuencias. Entre tanto sus amigos formaron una comisión. Estaban entre ellos el señor Durando, sacerdote de la Misión, el teólogo Ortalda y el abate Peyrón y era uno de los miembros más destacados el canónigo Lorenzo Gastaldi. Quería el Canónigo convencer a don Bosco para que admitiera aquel proyecto, se sujetara a dicha comisión y se sometiera a las reglas o estatutos que le serían propuestos. Le aseguraba al mismo tiempo que la misma comisión le ayudaría económicamente y de otras maneras, con gran ventaja para su Obra. Se intentaba, en una palabra, reducir a don Bosco a la situación de simple Director de Valdocco. ((**It3.454**)) Se celebró una conferencia preliminar y plenaria, que fue la primera y la última. Cuando don Bosco oyó los razonamientos del canónigo Gastaldi, observó, en primer lugar, que no era conveniente semejante alianza. Y añadió: -Comencemos por el Oratorio de Vanchiglia: don Juan Cocchis está entusiasmado con la gimnasia; para atraer a los muchachos les hace manejar palos y fusiles; pero en su Oratorio casi no existen funciones de iglesia. Yo, en cambio, procuro que nuestro palo sea la (**Es3.353**))
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