Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


((**Es17.387**) al abrirse, encontró a don Bosco sentado en el lecho y despierto. Entonces le preguntó con inquietud: -Don Bosco, >>se siente mal? -No, no, respondió con tranquilidad. Está tranquilo; vete a dormir. Por la mañana, apenas se hubo levantado, fue a visitarlo. Estaba sentado en el sofá en un estado de grandísima postración. -Don Bosco, >>ha sido usted quien ha gritado esta noche?, le preguntó don Francisco Cerruti. -Sí, he sido yo, replicó con el rostro aún demudado. ->>Y qué le ha sucedido? Viendo que dudaba aún, le pidió que, por favor, se lo dijese: -He visto, le dijo muy serio, al demonio que entraba en esta casa. Estaba en un dormitorio y pasaba de una cama a otra diciendo de vez en cuando: -íEste es mío! Yo protestaba. De pronto se precipitó sobre uno de aquellos jóvenes para llevárselo. Yo comencé a gritar y él se arrojó contra mí, como para estrangularme. Dicho esto, el siervo de Dios, conmovido y derramando lágrimas continuó: -Querido Cerruti, ayúdame. He venido a Francia a buscar dinero para nuestros jóvenes y para la iglesia del Sagrado Corazón, pero aquí existe ahora una necesidad más grave. Hay que salvar a estos ((**It17.449**)) pobres jóvenes. Lo dejaré todo y pensaré en ellos. Hagamos un buen ejercicio de la buena muerte. Aquella noche el Director de la casa anunció el ejercicio de la buena muerte, añadiendo también que don Bosco confesaría a quienes lo deseasen. Confesó, en efecto, en su habitación, sentado en el sofá, porque la postración de fuerzas que sufría no le permitían usar la silla. Todo procedió tan bien que don Bosco dijo después bromeando: -Mira, el demonio me ha hecho perder una noche, pero ha recibido un buen estacazo. También don Pablo Albera, al tener noticias por don Francisco Cerruti del sueño de don Bosco, confirmó lo dicho por el Santo, añadiendo: -Don Bosco tiene razón. Hay algunos jóvenes que me hacen llorar con su mala conducta. Más tarde don Francisco Cerruti quiso saber de labios del Siervo de Dios, si había visto entrar al demonio en otras casas y respondió que sí, señalando algunas. (**Es17.387**))
<Anterior: 17. 386><Siguiente: 17. 388>

Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


 

 

Copyright © 2005 dbosco.net                Web Master: Rafael Sánchez, Sitio Alojado en altaenweb.com