Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


((**Es15.137**) condesa Jerónima Uguccioni. El día de Pascua por la mañana, se quedó atendiendo las visitas en casa y envió a su compañero de viaje a celebrar la misa en la pobre capillita del Oratorio; mas, por la tarde, fue allí él mismo. Asistido por don Miguel Rúa y don Faustino Confortóla, impartió la bendición eucarística; después repartió a los muchachos una gran cantidad de caramelos que le había regalado, para tal fin, una cooperadora. Se valió naturalmente de la preciosa ocasión para ganarse la amistad de aquella turba juvenil. Visitó también aquella tarde al Arzobispo, monseñor Eugenio Cecconi, ya que no le fue posible presentarse antes por celebrarse en la catedral las funciones de Pascua. Dedicó los otros dos días a visitar a los bienhechores y tratar algunos asuntos, como veremos más adelante. El último día no aceptó ninguna otra invitación y comió con sus Salesianos. Durante aquellos días visitó a muchas personas y dejó tras sí una estela luminosa, que no sabemos decir si fue de admiración por ((**It15.148**)) su fascinante amabilidad o de veneración que se transparentaba en su rostro, en su hablar y en toda su persona 1. Nuestros viajeros llegaron a Roma por la noche del día 20 de abril. Antes de llegar a Florencia y después de salir de allí, conocieron a muchos que ya eran cooperadores o que pidieron serlo. Esta vez don Bosco no se hospedó en Tor de'Specchi, sino que encontró un discreto alojamiento en la casita adquirida, junto a la iglesia del Sagrado Corazón. Don Miguel Rúa describe así las condiciones del lugar 2: <(**Es15.137**))
<Anterior: 15. 136><Siguiente: 15. 138>

Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


 

 

Copyright © 2005 dbosco.net                Web Master: Rafael Sánchez, Sitio Alojado en altaenweb.com