Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


((**Es14.397**) importancia que León XIII daba al protocolo, podemos muy bien deducir que en aquel momento rindió a nuestro Beato Padre una gran señal de honor, pero ítambién debía ser muy interesante la conversación! De la audiencia referiremos lo poco que pudieron saber por don Bosco mismo los que estaban a su lado y está esparcido en su correspondencia, más el resto de que guardó memoria Lemoyne. Nunca se sabrá todo, porque don Bosco guardaba un secreto impenetrable de algunas cosas. El Beato contó al papa la historia del robo de las seis mil liras. El Papa le preguntó: ->>Por qué no me las trajisteis en seguida? -Padre Santo, respondió don Bosco; hace veinte días que presenté la instancia para obtener audiencia y la he repetido tres o cuatro veces antes de ir a Nápoles; monseñor Macchi no me dio respuesta alguna, es más, siempre decía que no era posible, y lo alargaba de una semana para otra. -Esto me desagrada mucho, observó el Papa. Monseñor Macchi nunca me dijo nada. Por lo menos, podíais decirlo a alguno de sus camareros. -Lo dije, respondió don Bosco. -íImaginad si no os iba a recibir! Recibo todos los días a personas que no tienen ningún asunto, a gente que no viene más que para sacar noticias al Papa, besarle la mano, etcétera; figuraos si no iba a recibir a un fundador, al superior de una Congregación, venido de lejos. Estad seguro de que el Papa no tiene nada que observaros a Vos y a vuestra Congregación; antes al contrario, os agradezco el bien que hacéis a la Iglesia. Pero >>por qué no le dijisteis a monseñor Macchi que teníais dinero para entregarme? -Se lo dije. ((**It14.463**)) -Podíais decírselo al cardenal Nina. -Se lo dije. ->>Y qué dijo él? -Que no podía hacer más que recomendarme a monseñor Macchi. -Tan pronto como recibí vuestra carta, pregunté a monseñor Macchi por qué no os había hecho pasar. Me contestó que le habíais dicho que teníais que ir a Nápoles. -Precisamente por eso pedí antes la audiencia tantas veces. Me urgía mucho entregarle aquel dinero, que me tenía intranquilo. -Me desagrada, me disgusta mucho, y íque no me dijeran nada! (**Es14.397**))
<Anterior: 14. 396><Siguiente: 14. 398>

Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


 

 

Copyright © 2005 dbosco.net                Web Master: Rafael Sánchez, Sitio Alojado en altaenweb.com