Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


((**Es1.330**) siempre cosas edificantes, o bien iba a la iglesia a hacer una visita al Santísimo Sacramento. Durante los cinco años que fui condiscípulo suyo en el seminario no falló nunca al propósito de contar cada día un ejemplo sacado de la historia eclesiástica, de la vida de los santos, o de las Glorias de María, nuestra amorosísima madre. >>Los compañeros le querían y le consideraban como un estupendo condiscípulo. Si, a lo mejor alguno indiscretamente se mostraba como competidor y de más valer, él con gran habilidad se hacía respetar y lo amansaba con su actitud. Si alguna vez sucedía algún pequeño percance entre los compañeros, o nacía alugna disputa por desacuerdo de opiniones, se metía él en medio y ponía a todos en paz>>. Hasta aquí don Giacomelli. Otro compañero de Juan en el seminario fue monseñor Teodoro Dalfi, natural de San Mauricio Canavese, que fue después sacerdote secular y párroco celosísimo en la archidiócesis de Turín, adscrito a la Misión de San Vicente de Paúl y que murió después de don Bosco. Era un joven excelente, pero de una vivacidad increíble, como correspondía a quien la divina Providencia destinaba a recorrer palmo a palmo, cuatro veces, Palestina, Egipto y otras regiones del Asia Menor. Fue un enamorado de los estudios bíblicos, tema sobre el cual dio a luz cuatro grandes volúmenes. Dejó escrito sobre don Bosco: <((**It1.408**)) dejé el hábito seglar para vestir la santa sotana e ingresar en el seminario de Chieri la víspera de Todos los Santos. Mi primer conocido fue el querido clérigo Bosco. Conocí también a su inseparable compañero Comollo. Más aún, como debía escoger a un compañero al comenzar el curso y, pareciéndome a propósito Comollo, me acerqué a él; pero, tuve que dejarlo a los pocos días porque, siendo él la tranquilidad y la paz personificadas, hubiera tenido conmigo una gran penitencia. >>Juan Bosco, aunque amigo de todos, no tenía familiaridad más que con un pequeño grupo de seminaristas de su curso o con conocimientos de pueblos vecinos al suyo. Había formado con ellos desde el principio una asociación de la que Bosco era el padre, el amo y el maestro por ser el de más edad. Entre ellos estaba el clérigo Comollo, a quien asistí la noche antes de su muerte; el clérigo Zucca de unpueblo cercano, Picchiotino, Antonio Avatanco, Burzio de Poirino y Ronco de Chieri, los cuales con alguno más que no recuerdo, pasaban ordinariamente todo el recreo oyendo lo que él les contaba, y esto principalmente después de la cena. >>Yo, para desquitarme de los tres años de laboratorio farmacéutico (**Es1.330**))
<Anterior: 1. 329><Siguiente: 1. 331>

Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


 

 

Copyright © 2005 dbosco.net                Web Master: Rafael Sánchez, Sitio Alojado en altaenweb.com