Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


((**Es9.494**) Roma, 25 de febrero de 1869. ...La carta de Gianduya ha sido leída en presencia de Fanny y de la condesa Calderari entre las risas y aplausos de los oyentes. Ahora se acerca el tiempo en que nuestro queridísimo don Bosco se marchará de Roma. Anteayer comió con nosotros. María invitó expresamente a un hermano suyo con su esposa, que está aquí en Roma, para que conociera a este santo Varón y gozara de su benéfica influencia. El asunto de la apertura de la casa en Roma marcha bien; la Providencia arreglará todo poquito a poco, aunque por el momento, tal vez, no se vea la abundancia de donativos que sería de desear; pero nuestro querido don Bosco, con su santa calma, asegura que se encontrará el dinero necesario. A veces causa maravilla que familias riquísimas respondan que, por el momento, no les es posible dar dinero. ((**It9.544**)) Si ahora que nadan en la abundancia no les es posible, no sé que fenómeno podrá moverles. La duquesa de Sora ha estado y sigue todavía enferma. Dice Guidi que pronto se acabarán las medallas pero, en la casa de la moneda, la palabra pronto equivale a despacio; él me dijo que, como tienen que acuñar monedas y otras medallas con las mismas máquinas, se requiere un poco de tiempo. Termino mi carta con mil saludos de María y de todos los de la familia. En sus oraciones a la Santísima Virgen acuérdese de su servidor... ANGEL VITELLESCHI El Caballero había dado orden de que se preparasen lo antes posible cincuenta mil, o mejor cien mil medallas de María Auxiliadora, porque ya no le quedaban. Roma, 27 de febrero de 1869. ...Me alegro del bien realizado aun moralmente con su feria, pero lo siento por su salud, que creo ha descuidado en exceso... Siento que dentro de pocos días nos dejará nuestro don Bosco. Usted estará contentísimo, no así nosotros... pero esperemos. Necesito un Católico Instruido, con cantos dorados: he privado de él a una persona que lo había adquirido, para hacer un regalo, según el deseo de don Bosco... M. MAGDALENA GALLEFFI Roma, 28 de febrero de 1869. Por mediación de don Bosco, que desdichadamente nos deja, respondo a la suya y de nuevo le agradezco mucho la caridad tenida con el pobre R.: espero que no haya sido en balde y que pronto o tarde fructificará en aquella alma; el pobre joven está muy enfermo. íCuánto siento que se marche don Bosco! Pero usted me perdonará esta expresión, >>no es así? Así pues, diré que me alegro por ustedes de que vuelva ahí... (**Es9.494**))
<Anterior: 9. 493><Siguiente: 9. 495>

Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


 

 

Copyright © 2005 dbosco.net                Web Master: Rafael Sánchez, Sitio Alojado en altaenweb.com