Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


((**Es9.17**) pareció que había algo que cambiar o añadir, y, aunque poco apto para tal fin, confiado en la asistencia de María, asiento de la sabiduría, me he puesto a copiarlo, añadiendo las variaciones que, dentro de mis pocos conocimientos, me parecían del caso y dejando así intacto el original. Esperando tener acabada dentro de pocos días esta copia, un poco distinta del original, he decidido ir yo mismo a presentar una y otra a V. S. Rvma. para explicarle de viva voz los motivos de los cambios hechos (dejando sin embargo totalmente la solución a su sabio entender) y para oírle acerca de diversas cuestiones relacionadas con dicha historia. No obstante, antes de trasladarme ahí, ruégole tenga la bondad de indicarme cuanto antes, si V. S. Rvma. estará en casa a primeros de la próxima semana, fecha en la que, si Dios quiere, podría ir; además, si cree conveniente, que yo, para ganar tiempo y evitar mayores molestias, presente antes dicha historia al señor Obispo de Acqui para la formalidad de la revisión. ((**It9.4**)) Por último, quisiera pedirle que tuviera la bondad de prestarme alojamiento, si le fuera posible, en ese Oratorio, durante el poco tiempo que deberé quedarme y así tener mayor facilidad para despachar lo antes posible, tanto por la crítica estación en que estamos, como por las ocupaciones que tengo. Rogando cordialmente a la Santísima Virgen que se digne premiarle con largueza todo lo que hace por este su Santuario, le saludo con toda distinción, profesándome con profundo respeto de V. S. Rvma. Santuario de Nuestra Señora de la Parroquia, 13 de noviembre de 1866. Su seguro servidor JOSE POGGIO, párroco Don Bosco había entregado una copia de dicho manuscrito a don Juan Bonetti, puesto que nosotros la hemos encontrado precisamente entre sus cuadernos. Ya antes de que éste fuera sacerdote, le enviaba las obras destinadas a la imprenta para que las revisase y corrigiese y, a veces, para que las completase. Y así continuó haciendo durante toda su vida. Don Juan Bonetti era para esto su incansable brazo derecho. Como hábil escritor, resultaba minucioso en las correcciones; están tan atestados de ellas sus manuscritos, que muchas páginas resultan casi ilegibles. Dejó escritos gran número de sermones y parece que no subía jamás al púlpito sin haberlos redactado o al menos ordenado con un amplio esbozo y siempre con abundancia y precisión de doctrina. Habiendo perdido don Bosco unos cuadernos, como anteriormente se dijo, para una historia universal de la Iglesia, encargó a don Juan Bonetti que llenara esta laguna; y comenzó él este trabajo hacia 1862 y lo continuó durante muchos años. Pero no nos queda más que la primera época, en dos volúmenes manuscritos, que comprenden (**Es9.17**))
<Anterior: 9. 16><Siguiente: 9. 18>

Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


 

 

Copyright © 2005 dbosco.net                Web Master: Rafael Sánchez, Sitio Alojado en altaenweb.com