Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


((**Es8.31**) el día señalado por la Iglesia, esto es, el 29 de enero, domingo IV después de la Epifanía. En la forma acostumbrada, pero más solemnemente que en años anteriores, tuvo lugar la conferencia para los salesianos, prescrita por el Reglamento. Don Bosco presidió la reunión en su antecámara. Don Miguel Rúa, director de Mirabello, y don Domingo Ruffino, director de Lanzo, contaron satisfechos el bien que se hacía en sus colegios. Estaba presente don Domingo Pestarino, llegado desde Mornese. Don Bosco tomó la palabra para dar gracias y elogiar a sus colaboradores, narrando cuanto se había hecho en el Oratorio de Valdocco, animando a todos a trabajar por el éxito de los Oratorios Festivos y les aseguró la protección de la Santísima Virgen. Concluyó manifestándoles su decisión de organizar una nueva tómbola. ((**It8.21**)) Efectivamente, él ya había empezado a preparar y ordenar lo necesario para la misma. Por de pronto, debería formar una Comisión, compuesta de treinta y dos miembros, elegidos entre los más conspicuos ciudadanos. No era fácil acertar en esta elección pero, después de muchas cartas y visitas, y también de corteses negativas, finalmente creyó haber alcanzado el resultado apetecido. Don Bosco se dirigió al Alcalde de Turín rogándole aceptara la presidencia de la Comisión y recibió la siguiente respuesta: CIUDAD DE TURIN Secretaría particular del Alcalde Ilustrísimo y Reverendísimo Señor: Con relación a la Presidencia de la Comisión para una tómbola en favor de su Pía Institución, el abajo firmante comunica que habló con el señor Marqués de Ror… en los términos convenidos ayer en la entrevista que tuve el honor de sostener con V.S. y cumple con el deber de participarle que dicho señor Marqués me encarga informarle de que se sentirá muy satisfecho de poder ayudar a su Instituto y a V.S.; pero que, habiéndose convencido de lo imposible que es, en muchas ocasiones, separar la condición de alcalde de la de ciudadano privado, tomó la determinación de no asumir en adelante ningún compromiso en el que fácilmente se pueda confundir su posición de funcionario público con la de persona privada y que, por consiguiente, con mucho sentimiento no puede aceptar la Presidencia que se le ofrece. 11 de enero de 1865. El Jefe de la Secretaría CRETINI Don Bosco suplicó al Duque de Aosta, Príncipe Amadeo, que se dignase aceptar dicha presidencia y el Príncipe cortésmente aceptó.(**Es8.31**))
<Anterior: 8. 30><Siguiente: 8. 32>

Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


 

 

Copyright © 2005 dbosco.net                Web Master: Rafael Sánchez, Sitio Alojado en altaenweb.com