Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


((**Es5.329**) de don Bosco, que desde entonces no dejaron de ayudarlo. Dotados de una inteligencia y lealtad a toda prueba, progresaron tanto en el arte de la construcción, que llegaron a alcanzar merecida fama entre los primeros empresarios de Turín. Como urgía tener los locales a punto para empezar el próximo otoño, se aceleraron de tal modo las obras que, a finales de julio estaba cubierto el nuevo edificio y abovedadas las cuatro plantas, con lo que se esperaba poder habitarlas en breve. Mientras adelantaban las obras, don Bosco salió un día del Oratorio, y se topó en el camino con un carro de mulas parado, por lo que detuvo el paso. Los arrieros le dijeron: -No tenga miedo; fíese, siga adelante, son mulas mansas. Y don Bosco replicó graciosamente: -Ya mi madre me decía: Juanito, no te fíes nunca de quien no va a confesarse. Los arrieros le miraron con una sonrisa maliciosa, dando a entender que la pulla iba dirigida a ellos. Otra vez, iba él tan tranquilo por lo que hoy es avenida de la Reina Margarita; caminaba sin fijarse, cuando se encontró ante un caballo enganchado a un carro. El carretero le dijo que tuviera cuidado con el animal, porque podía soltarle una coz. Don Bosco le respondió: -Ya lo digo yo siempre: hay que cuidarse de quien no cumple con Pascua. Bien puede decirse que toda frase de don Bosco era una invitación a la confesión. Desde el principio, el Ministro Rattazzi, tras una petición de don Bosco, tuvo la delicadeza de asignarle enseguida mil liras ((**It5.460**)) para hacer frente a los primeros gastos de la nueva obra. El 9 de mayo de 1856, le escribía desde el Ministerio del Interior de Turín lo siguiente: El Ministro abajo firmante aplaude el proyecto del sacerdote don Juan Bosco, Director del Oratorio masculino de Valdocco, de ampliar la actual construcción para poder atender a un mayor número de pobres muchachos abandonados y le comunica que para ayudarle a sufragar los gastos correspondientes, ha determinado concederle una subvención de mil liras con cargo al Balance de este Ministerio. Lamentando que las estrecheces en que se halla el erario no permitan una mayor cantidad, le comunica que dicha suma, le será satisfecha con la entrega de quinientas liras por el Cajero de este Ministerio y las restantes por el Tesorero de la Provincia de esta capital. El Ministro URBANO RATTAZZI (**Es5.329**))
<Anterior: 5. 328><Siguiente: 5. 330>

Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


 

 

Copyright © 2005 dbosco.net                Web Master: Rafael Sánchez, Sitio Alojado en altaenweb.com