Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


((**Es3.18**)((**It3.7**)) CAPITULO II ESPIRITU DE PIEDAD Y "EL JOVEN CRISTIANO" MIENTRAS el enemigo del género humano, homicida que fue desde el principio, se afanaba para descristianizar el mundo, don Bosco proseguía trabajando sin descanso para formar un ejército de juventudes, amantes prácticos de la religión de Jesucristo, y estudiando el modo y manera para conducir a muchos a una vida perfecta. El apoyaba su educación cristiana en la oración, que practicó siempre con gran fervor, convirtiéndose en modelo constante y ejemplar de las almas. Sus apremiantes ocupaciones no le permitían entregarse a ella muchas horas al día; pero puede decirse que la que hacía era perfecta. Su compostura recogida y devota transparentaba su fe. No dejaba nunca de celebrar la santa misa, ni siquiera cuando estaba enfermo. Rezaba regularmente el breviario. Oraba varias veces al día por sí mismo, por las almas que le habían sido confiadas y particularmente por sus penitentes. Los que entraban en su habitación le encontraban muchas veces rezando con el rosario en la mano. Cuando rezaba en alta voz, pronunciaba las palabras con una especie de vibración amorosa, que daba a entender cómo salían de un corazón inflamado de amor y de una alma que poseía el gran don de sabiduría. A veces ((**It3.8**)) cuando estaba muy cansado, suspendía sus trabajos y se hacía leer un buen libro. Frecuentemente se lamentaba de no poder dedicar más tiempo a la oración vocal y mental; y suplía con muchas jaculatorias, cuyo sonido no salía de sus labios. Así lo atestiguan los primeros alumnos del Oratorio, don Miguel Rúa y don Juan Turchi entre ellos. Fruto de la riqueza de su espiritú de oración es el devoto, fácil y breve devocionario, para uso de la juventud, que don Bosco ideó. Eran innumerables los libros de piedad que corrían por las manos(**Es3.18**))
<Anterior: 3. 17><Siguiente: 3. 19>

Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


 

 

Copyright © 2005 dbosco.net                Web Master: Rafael Sánchez, Sitio Alojado en altaenweb.com