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((**Es2.379**) me acompaña siempre a dar una vuelta, que bien lo necesita. Ruégole entregue al portador de la presente los ((**It2.506**)) paquetes de Tonín, que están todavía en la que fue mi habitación en el Refugio, y además sus libros. Haga también el favor de mandarme un añalejo, pues aquí no sé si es día festivo o laboral. El viernes y sábado pasados ha llovido por aquí lo suficiente, con lo que ha desaparecido el triste aspecto de los campos, que se han vestido de aspecto primaveral. >>Un cordialísimo dominus tecum para usted, don Pacchiotti, don Bosio, etc. Tengo un ligero dolor de muelas. >>De V.S. Afectísimo servidor y amigo DON BOSCO >>P.S. Dé también noticias mías a don Cafasso>>. El teólogo Borel cumplió los encargos de don Bosco y le mandó una minuciosa relación sobre la marcha del Oratorio, a la que don Bosco respondió: <>íMuy bien, señor Teólogo! Su minuciosa carta sirvió de gratísima lectura para mí y para algunos amigos míos. Estoy contentísimo de que todo lo del Oratorio progrese como se esperaba. >>Estupendo que don Triverio ayude en el Oratorio; pero esté atento, porque él trata a los chavales con mucha energía y sé que algunos se digustaron. Haga usted de modo que el aceite suavice nuestro Oratorio. Le mando dos pichones de nuestro palomar, que creo no digustarán a don Pacchiotti; yo hubiera preferido mandar dos pollos, pero no quiso mi madre, porque dice que esta clase de viandas hay que venir a comerlas en el mismo lugar donde se crían. Pero de esto hablaremos en otra carta. ((**It2.507**)) >>Ayer se enterró aquí cerca a un hombre que dio mucho que hablar. Enfermo incurable, según los médicos, prometió a instancias de una persona piadosa, confesarse, comulgar y oír una misa. Plugo a Dios la promesa y le otorgó la salud. Pero él olvidó la prometido; y, aunque su mujer y otras personas le advirtieron varias veces que cumpliera la palabra dad al Señor, él no lo hizo. íQué pena! Anduvo bueno casi un mes, pero el sábado pasado cayó repentinamente enfermo y en pocas horas, el infeliz, pasó a la eternidad, sin haber podido confesar ni comulgar. >>Ayer, durante el entierro, todo el mundo hablaba del suceso. >>Haga el favor de enviarme un ejemplar de estos libritos: Los seis (**Es2.379**))
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