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((**Es16.159**) les contó muchas cosas sobre don Bosco, y, entre otras, un episodio sucedido aquella misma mañana. Cuando don Bosco llegó, parecía que no veía nada en absoluto, pero, de improviso, volviendo la mirada a un joven de aire distinguido en medio de la muchedumbre apiñada y a quien nunca había visto, hízole señas para que se le acercase y le preguntó: ->>Qué hace usted en París? -Estudio derecho en la Universidad Católica, respondió. -Permítame ver ese libro. Era un devocionario para la misa. Dióle don Bosco un fuerte apretón de manos y le dijo: -Pronto será uno de los nuestros. Después de la misa, volvió a verlo en el coro, invitóle a seguirle y le repitió: -Le aguardo pronto en Turín. Se supo después que era hijo de una de las llamadas Damas servidoras de los pobres, asociación de señoras, que dedicaban algunas horas del día a ayudar a las Hermanitas en la asistencia de los enfermos pobres a domicilio. Su madre había pedido y obtenido el permiso para que la acompañara a la misa de don Bosco; jamás habría previsto lo que sucedió, mas como era muy piadosa no puso la mayor dificultad. Otros dos episodios nos atestigua la misma que fue la protagonista. Una joven de dieciocho años deseaba hacerse religiosa, pero no sabía decidirse a elegir la Congregación. Pensando que don Bosco la podría aconsejar, logró por medio del padre Bailly, su confesor, una audiencia para el veinticinco de abril y en ella le expuso sus dudas. ((**It16.183**)) El padre Bailly se inclinaba por las Hermanitas, pero a ella no le agradaban o, según su expresión, le parecían muy poca cosa. Estaban las Hijas de la Caridad, pero sentía cierta aversión hacia ellas, porque se las habían pintado como disciplinadas a lo militar, sin vida de familia, con superioras poco accesibles. Don Bosco oyó estas consideraciones, estuvo pensando un ratito y, después, le dijo sin titubear: -Hágase hermana de San Vicente. Unos años después la joven siguió su consejo y, con el nombre de Sor Isabel, es religiosa de ese Instituto desde hace cuarenta y cinco años. Animada por tan buena acogida, quiso hacer el veinte de mayo un nuevo intento. Tenía ella una amiga de su edad, sordomuda de nacimiento. >>No podría don Bosco curarla? Volvió a las Asuncionistas con algunas compañeras el día de la segunda visita llevando consigo (**Es16.159**))
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