Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


((**Es13.477**) por estar abandonados. Mientras las leyes cuidan de los culpables, se deben ciertamente emplear grandes cuidados para disminuir su número. QUE MUCHACHOS SON PELIGROSOS Yo creo que puede decirse que no son malos, pero que corren peligro de llegar a serlo: 1.° Aquellos que van de las distintas poblaciones y de las diversas regiones del Estado a otras ciudades y regiones en busca de trabajo. Generalmente llevan consigo un poco de dinero, que en breve tiempo consumen. Si después no encuentran trabajo, caen en el peligro de entregarse al latrocinio y empezar el camino que les conduce a la ruina. 2.° Los que son huérfanos o no tienen nadie que les asista, quedan abandonados a la vagancia y a la compañía de los díscolos, faltos de una mano amiga, una voz caritativa que les hubiera podido conducir por el camino del honor y de la honradez ciudadana. ((**It13.556**)) 3.° Los que tienen padres, que no pueden o no quieren cuidarse de sus hijos: los echan de casa y los abandonan totalmente. Por desgracia, es grande el número de este tipo de padres desnaturalizados. 4.° Los vagabundos que caen en manos de los agentes del orden público, pero que todavía no son díscolos. Si éstos fueran recogidos en un hospicio, donde, se les instruyera y preparase para trabajar, ciertamente no acabarían en la cárcel y serían restituidos a la sociedad civil. REMEDIOS La experiencia ha dado a conocer que se puede atender eficazmente a estas cuatro clases de muchachos: 1.° Con lugares de recreo para los días festivos. Con juegos amenos, con la música, la gimnasia, los saltos, la declamación y el teatro se reúnen muy fácilmente. Con la escuela nocturna y dominical y con el catecismo, se da el alimento moral proporcionado e indispensable a estos pobres hijos del pueblo. 2.° En estas reuniones hay que indagar quiénes son los que no tienen patrono, y hacer de modo que estén ocupados y asistidos durante la semana. 3.° Se encuentran algunos, tan pobres y abandonados, que no tienen con qué vestirse, cómo alimentarse, ni dónde dormir por la noche. A éstos no se les puede atender más que con internados y casas de preservación, con artes y oficios y también con colonias agrícolas. INTERVENCION GUBERNATIVA El Gobierno puede colaborar de diversos modos, sin ocuparse de una administración detallada y sin tocar el principio de la caridad pública: 1.° Suministrando lugares de recreo para los días festivos; ayudando y suministrando el material necesario a esos lugares y escuelas. 2.° Proveyendo de locales para hospicios, dotándolos de los utensilios necesarios para las artes y oficios a que se dedicarían los muchachos internados en ellos. (**Es13.477**))
<Anterior: 13. 476><Siguiente: 13. 478>

Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


 

 

Copyright © 2005 dbosco.net                Web Master: Rafael Sánchez, Sitio Alojado en altaenweb.com