Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


((**Es10.179**) encargué a nadie para tratar asuntos relativos a la iglesia de los Capuchinos de Varazze; lo entendió mal quien lo refirió o alguien se ha constituido en delegado mío en cosas que ciertamente no pasaron por mi mente ni por sueño. Cuando hubo que responder al Ayuntamiento, el cual proponía dicha iglesia para la reunión festiva de los alumnos estudiantes, fui yo mismo a Génova para hablar con el Padre Provincial y oír su parecer, pero no estaba en la ciudad; entonces fui a Varazze, hablé largo y tendido con el padre Cristóbal, definidor, y con el padre Guardián del convento y, al ver que eran de parecer contrario, fui yo mismo a decir al Alcalde ((**It10.188**)) personalmente, que no pretendía servirme de la iglesia en cuestión; que para los internos se emplearía una sala y que, entretanto, pensara el Ayuntamiento en un local para los externos. Pero todo lo hice yo en persona, sin tomar consejo ni opinión ajena, y sin delegar a nadie. Estamos en tiempos difíciles; procuremos ayudarnos a hacer el bien, y no a estorbarnos. Hizo usted bien en escribirme; así puedo saber cómo andan las cosas para su norma y la de otros; pero le ruego vaya con mucho tiento en admitir cosas que se hacen correr a mi cargo y, cuando así fuera, tenga la caridad de comunicármelo, pues ciertamente me servirá de norma para evitar ciertas afirmaciones y ciertas decisiones que, por un lado enfrían la caridad, y, por otro, a menudo embarazan las mismas cosas que tienden a la gloria de Dios, que es lo que se busca por ambas partes. Dios nos bendiga a todos. Ruegue por mí que, con todo aprecio, me profeso Florencia, 15-9-1871. Su seguro servidor JUAN BOSCO, Pbro. P. D. -De momento estoy en Florencia, pero mañana estaré de vuelta en Turín. En efecto, mientras la capilla para los internos se instaló en una sala, para los externos se destinó el Oratorio de la Asunción, muy próximo al Colegio. 11. De vuelta Fue enseguida a Lanzo, donde se predicaron los ejercicios espirituales: del 18 al 23 la primera tanda y del 25 al 30 la segunda. Volvió a Turín y, de nuevo, partió para Castelnuovo. Iba a celebrar la fiesta del Santo Rosario en I Becchi y, al mismo tiempo, a ordenar un poco las mil cosas que llevaba entre manos y descansar unos días, pues estaba muy postrado. Así se lo escribía al caballero Tomás Uguccioni, con quien no había podido encontrarse en Florencia. (**Es10.179**))
<Anterior: 10. 178><Siguiente: 10. 180>

Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


 

 

Copyright © 2005 dbosco.net                Web Master: Rafael Sánchez, Sitio Alojado en altaenweb.com